Tres pilares para que una coreografía tenga éxito:
1. Originalidad
Lo principal en una coreografía es que tiene entretener al público por este motivo es de vital importancia que sea original, novedosa y que logre despertar alguna emoción de los asistentes. Para ello es vital que cuente con una magnífica canción y que consiga crear una conexión emocional con el público.
2. Actitud
Siempre que actúas tienes que poner actitud. Tienes que contagiar al público con tu energía, con tu postura, incluso con los gestos de las manos y de la cara. Por ello es importantísimo sonreír, cuidar la presencia y la elegancia. Al final se trata de contagiar al público con tu actitud para que también disfruten contigo.
3. Práctica
Cualquier espectáculo, actuación o coreografía requiere de muchos ensayos para lograr la conexión con tu pareja necesaria para realizar todos los movimientos y las acrobacias. Es muy importante estar concentrado en todo momento y trabajar el físico para ganar fuerza, velocidad, equilibrio, agilidad y confianza.